martes, 18 de febrero de 2025

Condena


Cada día afirmo aún más que nadie ha sabido verme más allá de mi piel.

Mi manera de sentir es incomprendida, y he desatado una rebelión al no quedarme callada.

He perdido facultades, hace mucho no escribo y nada de esto tiene coherencia, tengo tanto guardado por dentro que ya no sé cómo plasmarlo, solo hay un sinfín de pensamientos revueltos y lágrimas corriendo por mis mejillas.

Ya no quiero quedarme callada pero ya no quiero a nadie cerca, quiero alejarlos a todos.

Quiero no sentir. 

Quiero cerrarme y ser neutral.

Quiero que nada me afecte.

Quiero ser una piedra.

Es irónico que la persona que te hunde es la misma que busca protegerte, estoy rodeada de esas.

Personas que son un recordatorio de todo lo malo que he vivido, quiero dejarlas atrás.

Personas que vienen con navajas disfrazadas de consejos que me hieren, con la excusa de querer lo mejor para mí, con el pretexto de que solo quieren protegerme de la vida real.

Quien te quiere no te hiere, no te rompe, no te daña.

Quien te quiere te comprende y te aconseja que te permitas sentir.

Pero odio sentir.

Mis sentimientos solo se basan en cosas negativas, es verdad, he intentado cambiarlo pero al estar rodeada de gente que solo hiere, se vuelve imposible.

Qué manera de protegerme de la vida real, al atacarme cada que exista la oportunidad, con la excusa de que por fin sea 'feliz'. 

Cómo puede ser feliz alguien que quizás no debió nacer, que fue repudiada por su propia madre y rechazada por un sinfín de personas. 

Cómo puede ser feliz alguien que solo ven con hambre por su cuerpo y que le han hecho saber mil veces que solo sirve para unos cuantos orgasmos. 

Cómo puede ser feliz alguien que nadie jamás ha visto más allá de su piel.

La vida se encarga de recordarme cada día que quizás no estoy destinada a ser feliz, nací en desdicha y probablemente moriré así. 

Juro que deseé con todo mi corazón lo contrario, pero ya he perdido las esperanzas. 

Quizás estoy hundida, otra vez, pero puede que mi destino sea estar en el hueco. 

La verdad me da un poco de miedo exponer eso porque sí creo en el poder de las palabras y la manifestación, y quizás yo misma me estoy condenando, pero me siento tan mal que solo puedo pensar en eso.

Mi mente está nublada como mis ojos, y no hay claridad en mi frente... y mis dedos solo se dejan llevar.